Es el reconocimiento teórico y práctico de que una realidad - en este caso la persona - es valiosa y por tanto, se actúa en consecuencia. En concreto, respetar a una persona es cuidar, ayudar, favorecer... con acciones concretas la vida de esa persona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios serán moderados. No se admite ningún comentario anónimo.